Carlos Vela no es un futbolista mexicano más en la historia de la Major League Soccer (MLS). Su legado en el club de Los Ángeles FC (LAFC) es tan profundo que él puede presumir ser considerado “Leyenda” del equipo, una distinción que pocos jugadores han logrado alcanzar. Fue un momento especial en la historia del club, y su impacto sigue siendo sentido hasta el día de hoy.
Vela fue uno de los primeros jugadores importantes que se unieron a LAFC cuando el club comenzó a tomar forma. Era una estrella en ascenso en el fútbol mexicano, pero nunca había probado suerte en la MLS. Sin embargo, desde el momento en que se unió al equipo en 2018, se convirtió en el corazón del ataque de LAFC y pronto se ganó el apodo de “Tecatito” (pequeño artista) por sus habilidades únicas en el campo.
Fue una época emocionante para los aficionados al fútbol en Los Ángeles, que finalmente tenían un equipo que podía competir con los mejores del país. Vela se convirtió en la figura central de ese éxito, marcando goles importantes y ayudando a su equipo a alcanzar el segundo lugar en la conferencia oeste en su primera temporada.
Sin embargo, fue en la segunda temporada cuando Vela realmente destacó. Fue nombrado Jugador del Año de la MLS después de marcar 34 goles en 52 partidos y ayudar a LAFC a ganar su primer título en la historia del club, el campeonato de la MLS Cup. Ese momento fue especial no solo porque Vela se convirtió en el tercer mexicano en ganar ese premio después de Cuauhtémoc Blanco, Jorge Campos y Luis Hernández, sino también porque marcó un punto de inflexión para el fútbol en Los Ángeles.
“La Noche de Carlos Vela” se convirtió en una noche memorable en la historia del club. Fue una noche en que Vela se despertó al final de la temporada regular como líder máximo anotador de la liga, y su equipo estaba listo para enfrentar a los Seattle Sounders en la MLS Cup. La ciudad de Los Ángeles se unió para ver al héroe local hacer historia, y Vela no defraudó. Marcó dos goles en el partido, incluyendo el gol decisivo en el tiempo extra, para darle a LAFC su primer título en la historia del club.
Esa noche fue más que un simple partido de fútbol; fue una celebración de la pasión y el orgullo que Vela había inspirado en los aficionados al fútbol en Los Ángeles. Fue un momento que se seguirá recordando por años, y que será recordado como uno de los momentos más emocionantes en la historia del club.
Hoy en día, Vela sigue siendo una figura clave para LAFC, aunque ya no juega para el equipo después de anunciar su retiro en 2021. Sin embargo, su legado permanece fuerte, y él sigue siendo un ídolo para los aficionados al fútbol en Los Ángeles. Su historia es una lección sobre la importancia del trabajo duro, la dedicación y el amor por el juego, y es algo que inspira a generaciones de futbolistas mexicanos que siguen sus pasos.